Lhasa Apso, el majestuoso perro centinela venido del Tíbet

El Lhasa Apso es una de las razas de perros más antiguas, con origen en el Himalaya tibetano. De tamaño pequeño, pelo largo y sedoso, y un gran sentido del olfato y del oído, lo que le convierte en un perro guardián siempre alerta.

Se le conoce como Abso Seng Kye, que se traduce como “perro león centinela”. No es amigo de extraños por lo que precisa socialización temprana.

La raza también ha recibido el nombre de Perro León o Perro de Palacio, debido a su asociación con los monjes en el Tíbet y la nobleza China durante el siglo XVII.

Orígenes del Lhasa Apso

El Lhasa Apso es una razas antigua y se cree que se originó 800 a.c. en el Tíbet. De hecho, lleva el nombre de la ciudad sagrada del Tíbet, Lhasa. Fue un perro centinela dentro de los palacios y monasterios budistas. Los mastines se utilizaron como primera línea de defensa exterior, y los Lhasas fueron el sistema de alarma canino interior. 

El Lhasa llegó por primera vez a occidente a principios del siglo XIX, en 1933 el Dalai Lama se lo regaló a una pareja de Nueva Jersey. El American Kennel Club (AKC) reconoció la raza en 1935.

Características de la raza Lhasa Apso

El Lhasa Apso es un perro pequeño con un pelaje largo, elegante y sedoso, y una cola especialmente peluda. Tiene un hocico puntiagudo con una nariz negra ligeramente elevada, ojos almendrados oscuros y orejas triangulares y caídas.

A pesar de su pequeño tamaño, tiene un cuerpo compacto y musculoso, lo que le hace parecer mucho más robusto de lo que sugiere su apariencia.

El pelo del Lhasa Apso es largo y denso, y viene en una variedad de colores, incluyendo arena, miel, dorado, negro, gris, blanco o particolor (formado por el blanco y otro).

Tiene dos capas de pelaje: exterior e interior. El pelaje exterior se muda una vez al año y el pelaje interior es más estable y duro, lo que le protegería de las temperaturas extremas del Tíbet.

Carácter del Lhasa Apso

El Lhasa Apso es un perro leal, inteligente y alerta. Son buenos para aprender nuevos trucos y les gusta que les den un trabajo que hacer. Estarán atentos a su familia y ladrarán para avisar si hay alguien en la puerta, digamos que son perros guardianes pequeños. Su fuerte instinto guardián y protector puede convertirse en “agresividad” si no es correctamente entrenado y socializado.

Son buenos con los niños, pero sacarán su malhumor con ellos si no se les entrena correctamente cuando son cachorros. Necesita como muchas otras razas, una socialización temprana.

Se adaptan mejor a los hogares en los que hay alguien en casa la mayor parte del tiempo y en los que reciben mucha atención. Les encanta formar parte de la familia y serán más felices si se les incluye en todas las actividades familiares.

No obstante, a diferencia de otros perros mini, no le importa que lo dejen solo durante horas. El Lhasa Apso es un perro independiente y majestuoso y no suele sufrir estrés por separación.

Los Lhasa Apso sobresalen en cursos de entrenamiento de agilidad y algunos incluso han sido conocidos como perros pastores y por su habilidad para trabajar como perros de terapia. 

Cuidados del perro Lhasa Apso

Es una raza que no se adapta a cualquier propietario. Quizá se parezca más a un gato que aun perro por su independencia, de forma que podríamos decir que es uno de los perros que actúan como gatos.

Al Lhasa Apso le encanta formar parte de la familia, pero tendrás que ganarte su confianza. A partir de ese momento, te darás cuenta de que es cariñoso, juguetón, fiel…y un poco tozudo.

Su pelo largo requiere bastantes cuidados y atención. Una limpieza regular para evitar que se formen nudos. Es necesario le dediques un tiempo a cepillarle, te encontrarás nudos habitualmente en su pelaje y hay riesgos de infecciones en la piel o de padecer algún tipo de dermatitis en perros. Algunos dueños de perros Lhasas optan por mantener el pelaje de su perro corto en un estilo de “corte de cachorro” para que sea más fácil de mantener.

En lo que se refiere a su alimentación, conservantes y alimentos aceitosos no son buenos para esta raza porque pueden conducir a la obesidad. La comida natural para perros es la mejor opción ya que está elaborada con ingredientes de alta calidad.

Salud del Lhasa Apso

Debido a su largo pelaje y a su tendencia a mudar, el Lhasa Apso tiene un mayor riesgo de desarrollar infecciones en la piel y por el largo pelo que cubre sus ojos, es propenso a la conjuntivitis. Acompáñate de productos naturales para el cuidado de la piel y pelo de perros.

En esta raza se conoce una enfermedad hereditaria de la piel, la adenitis sebácea. Otros problemas de salud que pueden aparecer en el Lhasa Apso son la displasia de cadera y trastornos oculares que pueden conducir a la ceguera, como la atrofia progresiva de retina.

Curiosidades de la raza Lhasa Apso

No te extrañe que te encuentres a amigos que confundan el Lhasa Apso con otro de los perros chinos pequeños, el popular Shih Tzu. Es muy frecuente que ocurra.

La historia detrás del origen de su nombre también es interesante. Lhasa es el nombre de la capital del Tíbet y Apso en tibetano significa “perro peludo”. El nombre Lhasa Apso quiere decir perro de pelo largo de Lhasa.

Tendrás que hacer porque se eche amigos. No va a ser sencillo que haga comunidad en el parque cuando salgas a pasearle, va a querer mostrar su posición dominante.

Ficha del Lhasa Apso