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¿Qué es el gusano del corazón?
El gusano del corazón, o dirofilariosis, es una enfermedad parasitaria que se produce por el gusano sanguíneo Dirofilaria Immitis. Una vez entra al organismo del animal puede alojarse en el corazón o en las arterias pulmonares y comienzan a alimentarse con los nutrientes que se encuentran en la sangre, hasta llegar a medir más de 30 cm.
Es una enfermedad grave que puede ser mortal si no se trata a tiempo. Una vez el gusano entra al torrente sanguíneo puede crecer y reproducirse rápidamente, por tanto, comienza a obstaculizar la circulación de la sangre y si se deja avanzar puede llegar a causar un paro cardiaco o un problema respiratorio grave en el caso de los gatos.
Causas del gusano del corazón
La forma más común de contagio es a través de los mosquitos: cuando un mosquito pica y se alimenta de la sangre de un gato o un perro contagiado, absorbe también las larvas que están viviendo allí. Por tanto, al picar a otro animal sano le traspasará los gusanos a su torrente sanguíneo, iniciando su crecimiento y reproducción.
La otra posibilidad de contagio es a través de la gestación: si una madre contagiada queda embarazada, traspasará los gusanos al organismo de sus crías a través de la placenta y haciendo que nazcan con esta infección. Normalmente los gusanos que se transmiten en esta situación aún están en proceso de maduración.
Síntomas del gusano del corazón
El gusano del corazón no suele generar síntomas fuertes sino hasta su fase avanzada, cuando los gusanos ya se han convertido en adultos y se han reproducido en gran cantidad. Estos síntomas suelen ser:
- Dificultad para respirar
- Aumento del ritmo cardiaco
- Cansancio y fatiga
- Hemorragias por la nariz
- Hemorragias por la boca
- Pérdida de peso
- Inapetencia
- Desmayos
- Tos
- Vómito
- Tromboembolismo pulmonar (en gatos)
- Paro cardiaco

En el caso de los gatos, los gusanos pueden llegar hasta su sistema nervioso central y causar:
- Convulsiones
- Ceguera
- Salivación en exceso
- Falta de control muscular
Diagnóstico del gusano del corazón en perros
Debido a que es una enfermedad asintomática, el gusano del corazón en perros suele detectarse cuando está en una fase muy avanzada y en estado grave. Sin embargo, es posible diagnosticarlo a través de exámenes de sangre que detectan la presencia de los gusanos o de alguno de sus síntomas secundarios.
En algunos casos de filariosis canina recomiendan realizar tomografías o radiografías, ya que los exámenes de sangre pueden alojar falsos negativos. Cuando los riñones o el hígado están afectados, también suelen realizarse los exámenes correspondientes para descartar que la causa sea esta enfermedad.
Tratamiento de esta enfermedad
Cuando se detecta a tiempo, el gusano del corazón en perros puede tratarse con diferentes medicamentos que van eliminando a las larvas y los gusanos que están en el organismo. Suele ser un tratamiento largo, primero se expulsan las larvas y luego los gusanos adultos. Las mascotas deberán mantenerse en reposo y recibir tratamiento para el resto de las patologías secundarias.
En el caso de los gatos, su sistema inmune es capaz de destruir muchas de las larvas que se alojan en su organismo cuando aún están en fase de maduración, sin embargo, la permanencia de un solo gusano deberá recibir tratamiento para evitar consecuencias en su sistema respiratorio.
Prevención del gusano del corazón
La única forma de prevenir el gusano del corazón en perros es a través del control parasitario. Las mascotas deben ser desparasitados regularmente, pueden usarse pastillas para desparasitar perros que estén diseñadas para prevenir parásitos a nivel interno del organismo y collares antiparasitarios que repelan los mosquitos.
Es importante visitar periódicamente al veterinario para poder detectar cualquier síntoma secundario y cumplir con un plan mensual de desparasitación que garantice una buena salud. Las mascotas que se curan del gusano del corazón deberán recibir tratamiento preventivo de por vida para evitar un rebrote de la enfermedad.