La diabetes en gatos es uno de los problemas endocrinos más frecuentes en los gatos, de hecho su presentación oscila entre uno de cada cien a uno de cada cuatrocientos gatos.
Si no se trata, puede provocar pérdida de peso, pérdida de apetito, vómitos, deshidratación, depresión, problemas con la función motora, coma e incluso la muerte.
Para hablar de posibles causas de la diabetes felina, síntomas y cómo diagnosticarla a tiempo, hemos hablado con Carlos Rodríguez, veterinario y Presidente de la Fundación Mascoteros.
Índice
Tipos de diabetes en gatos
Existen varios tipos de diabetes que pueden afectar al hombre y a los animales. Si nos fijamos en la clasificación de la diabetes mellitus propuesta para la enfermedad humana tendremos los siguientes tipos de diabetes en gatos:
- Diabetes mellitus insulinodependiente (DMID o Tipo I): las células beta del páncreas sufren destrucción progresiva y pierden su capacidad para segregar insulina; la secreción de insulina es insuficiente para mantener la tolerancia normal a la glucosa cuando aproximadamente el 75% de las células beta están destruidas. La DMID se caracteriza por deficiencia de insulina y el tratamiento depende de la administración de insulina exógena.
- Diabetes mellitus no insulinodependiente (DMNID o Tipo II): se caracteriza por resistencia a la insulina en los tejidos periféricos, por células beta disfuncionales o por ambas alteraciones; la DMNID es una deficiencia relativa de insulina ya que la secreción de la misma puede ser elevada, normal o baja. La glucemia en la diabetes mellitus Tipo II depende de la respuesta relativa de los tejidos periféricos a la secreción de insulina. En este tipo de diabetes no siempre es necesaria la aplicación exógena de insulina para mantener un nivel adecuado de glucosa.
- Diabetes mellitus secundaria (Tipo S).
- Deterioro de la tolerancia a la glucosa (Tipo DTG): como por ejemplo la diabetes gestacional.
- Anomalía previa de la tolerancia a la glucosa (Tipo ATGPrev).
Al igual que en el caso del hombre, la diabetes de Tipo II o DMNID es la más frecuente en los gatos. Se caracteriza, como ya hemos dicho, por una “resistencia” orgánica a la acción de la insulina o, dicho de otra forma, a una menor sensibilidad de los tejidos a los efectos de la insulina.
Esto provoca finalmente que el organismo del animal no puede compensar el problema aún desencadenándose un aumento compensador de la secreción de insulina pancreática.
Causas de la diabetes mellitus tipo II en gatos
Entre las causas de la diabetes mellitus Tipo II en gatos, las siguientes:
- Una disminución de la sensibilidad de los tejidos (principalmente del hígado y de los músculos) a la insulina.
- Por variaciones en los niveles de secreción pancreática de insulina.
Diabetes felina por disminución de la sensibilidad
El hígado, los músculos y los tejidos periféricos del gato son unas seis veces menos sensibles a la acción de la insulina que el resto de tejidos orgánicos; esto es debido, entre otras razones, a que los receptores específicos a la insulina se ven disminuidos en número en dichos emplazamientos.
Entre los principales factores responsables de la disminución de sensibilidad a la insulina tenemos:
- OBESIDAD: El sobrepeso es una causa reconocida de predisposición a la aparición de diabetes. En el caso del gato esta predisposición del sobrepeso se confirma, al igual que podemos asegurar que el retorno a un peso normal puede acabar con el problema. Los estilos de vida sedentarios, el consumo de alimentos ricos en energía… contribuyen al aumento de peso, a la aparición de la obesidad y a la presencia de diabetes en gatos.
- GENÉTICA: Existen ciertas teorías que defienden la “ventaja” que supone para un gato ser poco sensible a los efectos de la insulina. Los felinos son carnívoros estrictos, su consumo alimentario es rico en proteínas y pobre en hidratos de carbono… La baja sensibilidad a la insulina puede permitirles el mantenimiento de correctos niveles de glucosa en sangre a pesar del tipo de dieta ingerida.
- ACTIVIDAD FÍSICA: El sedentarismo provoca en los seres humanos un aumento de resistencia a la insulina y en el caso de los felinos parece suceder lo mismo. Un gato que vive en el hogar no tiene que cazar para alimentarse, su nivel de actividad es francamente bajo y ello provoca un aumento de resistencia orgánica a los efectos de la insulina. Dotarle de muebles aéreos y juguetes interactivos y con plumas ayudarán a reducir el riesgo de un exceso de sedentarismo.
- SEXO: Los machos sanos en correcto estado físico son un 37% menos sensibles a la insulina que las hembras en el mismo estado sanitario y corporal. Un gato macho tiene entre 1,5 y 2 veces más posibilidades de presentar diabetes que una gata.
Diabetes felina por alteración de la secreción de insulina
Existen varios mecanismos que explican las alteraciones de la secreción de insulina en la diabetes felina de tipo 2:
- AGOTAMIENTO DE LAS CELULAS BETA: Las células beta pancreáticas deben producir más insulina ante la aparición del problema. En su intento de mantener los niveles sanguíneos adecuados de glucosa, y tras el paso de los años, las células beta fracasan en su función y este fracaso conduce a una disminución de la secreción de insulina, a un aumento de la glucosa en sangre (hiperglucemia) y a la aparición de los signos de la diabetes en gatos.
- TOXICIDAD POR LA GLUCOSA: Cuando el aumento de los niveles de glucosa en sangre se mantienen, se produce una disminución aún más marcada de la producción de inulina. Esta marcada hiperglucemia provoca alteraciones histológicas y un daño permanente de las células beta pancreáticas.
- ALIMENTACIÓN: El consumo de alimentos ricos en energía predispone a la obesidad, a la resistencia a la insulina y finalmente al agotamiento de las células beta del páncreas.
¿Mi gato es diabético? Síntomas de la diabetes en gatos
La diabetes mellitus suele afectar a los gatos de edad avanzada (más de siete años), con sobrepeso u obesidad y de hábitos sedentarios.
Entre los síntomas más habituales de la diabetes en gatos se encuentran:
- polifagia (ingieren más cantidades de alimento)
- poliuria (orinan mayores cantidades de las normales)
- polidipsia (ingieren grandes cantidades de agua)
- existen más síntomas de la diabetes felina como perdida de peso, posturas plantígradas, aumento de sensibilidad de las zonas distales y de las extremidades…
Diagnóstico de la diabetes en gatos
Para confirmar que estos síntomas apreciados corresponden a una diabetes en gatos se debe realizar analítica sanguínea y de orina para confirmar la hiperglucemia (aumento de los niveles de glucosa en sangre) y la glucosuria (presencia de glucosa en la orina).
- Hemograma: Los resultados del hemograma completo suelen hallarse dentro de los límites de la normalidad en pacientes con diabetes mellitus no complicada.
- Perfil bioquímico: La característica constante e indispensable para el diagnóstico de diabetes mellitus es la hiperglucemia (aumento de la glucosa en sangre) persistente en ayunas y la glucosuria (glucosa en orina) en ausencia de otros procesos patológicos.
- Otros estudios bioquímicos: En el caso de diabetes mellitus difíciles de controlar con administración de insulina y correcto manejo dietético, sería recomendable la realización de pruebas de función tiroidea; tanto el hipotiroidismo como el hipertiroidismo pueden relacionarse con resistencia a la insulina y acompañar a la diabetes mellitus en gatos.
- Análisis de orina: La densidad específica de la orina de gatos con diabetes mellitus es superior a 1,025. La glucosuria es un hallazgo característico por lo que su ausencia descarta la posibilidad de que la patología del animal que se esta buscando se deba a diabetes mellitus.
La hiperglucemia en el perfil bioquímico también puede deberse a otras patologías además de la diabetes en gatos, a variados estados fisiológicos o a la administración de ciertos fármacos (corticoides, progestágenos, acetato de megestrol). En los gatos existen casos de hiperglucemia transitoria debida al estrés felino, pero en estos casos no se acompaña de glucosuria. Para un diagnóstico correcto pueden ser necesarias determinaciones repetidas de la glucemia.
Los gatos con diabetes mellitus pueden presentar también insuficiencia pancreática exocrina o pancreatitis.
Factores de riesgo de la diabetes felina
La diabetes felina mellitus Tipo II puede afectar a gatos de todas las edades, pero son más frecuentes los casos en animales de más de 6 años.
Por otra parte, esta patología afecta principalmente a machos castrados y se ha comprobado que la obesidad eleva unas cuatro veces el riesgo de DMNID felina.
Tratamiento de la diabetes en gatos
El tratamiento de la diabetes mellitus en gatos pasa por utilizar adecuadamente los fármacos y los alimentos. Te recomendamos leer nuestro artículo Tratamiento nutricional para gatos con diabetes con indicaciones sobre la dieta y composición deseada de la comida ideal para felinos diadnosticados.